La penúltima película de Bruce Lee es sin lugar a dudas la que lo llevo a ser una estrella de nivel mundial. Cargada de acción, adrenalina, clichés y un humor involuntario aunado a situación que parten toda lógica, como por ejemplo, las referencias raciales, Williams (Jim Kelly) el protagonista de origen Afroamericano es llamado continuamente “Nigga” y lleva una actitud de Pimp envidia de los mismísimos raperos norteamericanos.
La historia como siempre en las películas de acción es lo de menos pero se nota que se le trato tiempo, si bien no es profunda, si es lo suficientemente interesante para mantenernos pegados al televisor con esta trama mezcla de espionaje, trata de blancas y narcotráfico.
Las escenas de acción impecables solamente se nota un de censura cuando los peleadores finalizan (matan) a sus rivales, los combates personales son de buena manufactura y sin duda la mejor de la película son las peleas multitudinarias.
Excelente película cargada de Leyendas tales como que Bruce Lee y John Saxon no querían compartir créditos y este mito se solidifico cuando uno puede observar que en toda la película no hay un guion que haga que crucen la palabra o la presencia de Jackie Chan de la cual se cree que aparece como doble en una escena dentro de la cueva.
En pocas palabras, todo lo anterior citado hacen de “Operación Dragón” una de las mejores películas de Kung- fu de todos los tiempos.
Saludos.
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